Índice
Identidad civil: Alexis Blackburn
Identidad superheroica: Vodou (Vudú)
Tipo: Mutante Genético
Fotografía de archivo:
Historial:
Hijo/a de inmigrantes haitianos en Nueva York (apellido original Boucher), originalmente dos mellizos de distinto sexo en el vientre materno que, debido a la manifestación temprana y fortuita de una mutación genética, pasaron a ocupar un único cuerpo desde antes de nacer.
Durante toda su infancia ambos hermanos habitaron el cuerpo del niño sin dar muestras de ser algo más que un chico normal, a todos los efectos dos consciencias pero una sola personalidad. Al llegar a la pubertad comenzaron a manifestarse sus poderes, pero también empezó a alternar involuntariamente entre los cuerpos masculino y femenino. Eso provocó una gran confusión en Alexis y su entorno, pero pronto aprendió a camuflar esos cambios. A pesar de todo, sus resultados académicos mejoraron cualitativamente y recibió varias becas con las que pudo empezar una carrera universitaria años antes de lo normal.
Por esa época su hermano mayor Henri ingresó en el departamento de policía de Nueva York, y su padre les abandonó. En pocos años Alexis se doctoró en varias carreras universitarias relacionadas con la biología y la medicina, en un intento de aprender más acerca de su condición. Los continuos cambios corporales así como su creciente belleza fueron difíciles de disimular, pero la reclusión debida a sus estudios intensivos facilitó las cosas. En cuanto a sus otras capacidades, se abstuvo de usarlas por precaución y porque, a pesar de todos los conocimientos que había adquirido, seguían siendo inexplicables. Experimentó con su sexualidad lejos de su entorno académico y usó sus estudios de medicina y psicología para analizar su propio comportamiento, llegando a la conclusión de que poseía una única y fusionada personalidad que podía manifestar leves diferencias en sus emociones y respuestas según el cuerpo que habitara.
Aún no había alcanzado la mayoría de edad cuando su hermano mayor falleció en un tiroteo, durante el robo frustrado a un banco por parte de un criminal de poca monta conocido como Semtex Jack. Sin embargo, aunque éste fue capturado y encarcelado por sus numerosos robos, su culpabilidad en el asesinato de Henri no pudo ser suficientemente probada, con lo que fue condenado a una pena muy inferior a la debida. La pena por la pérdida, y el sufrimiento por el fallido proceso judicial hicieron que la madre de Alexis enfermara y acabara falleciendo tras unos meses. Por su parte Alexis, consumido/a por la ira y la frustración, abandonó sus ya demasiado fructíferos estudios y comenzó un largo vagabundeo por el lado más oscuro de la ciudad y de su propia psique.
Alienado/a de su propia vida y deseando ser cualquier otra persona, empezó a poseer a individuos al azar y a vivir a través de ellos sus ajenas vidas. Consciente de la perversión moral de estos actos se hundió aún más en su miseria pero, con el tiempo, y precisamente por el contacto repetido con tantas y tan mundanas existencias, alcanzó un estado de equilibrio hasta llegar a apreciar a alguno de esos individuos e incluso tratar de mejorar sus vidas. Un pequeño y selecto grupo de personas de diferentes estratos sociales y modos de vida se convirtieron para Alexis en las válvulas de escape para experimentar emociones y vivencias que se sentía demasiado dañado/a o vulnerable para resistir por su cuenta. De este modo llegó a considerarles casi su familia y le proporcionaron la catarsis que precisaba.
Pero esta curación no llegó sin mácula. Viviendo las vidas de otras personas cometió errores que las perjudicaron o dañaron, y los recuerdos y remordimientos le asaltarían con frecuencia, en sus sueños o en sus momentos ociosos. Lentamente la resolución de resolver las injusticias que Alexis o sus anfitriones habían sufrido (incluso por su causa) fue invadiéndole/a, y se convirtió en el guardián de su bienestar.
Llegado cierto momento se atrevió a abandonar prolongadamente sus refugios humanos y, recorriendo los peores barrios de la ciudad bajo ropajes informes o saltando de vagabundo en vagabundo, inspeccionó los bajos fondos criminales y con sensación de agravio y aprovechándose de su facultad para actuar a través de otros, sembró la discordia y buscó el castigo para ellos y sus cómplices.
Sin embargo ese contacto íntimo con sus mentes que no podía evitar, le hizo descubrir en varios de esos criminales la misma desesperación e impotencia que Alexis llevaba sintiendo mucho tiempo. Comprobó cómo algunos delinquían movidos por la necesidad o la confusión, y dudó de sus propios métodos. Intentó reformar a los más prometedores y en algunos casos lo consiguió, estableciendo una pequeña red de confidentes e infiltrados en las mafias locales, con un tal Devin Hunter como enlace directo.
Ese periodo tampoco estuvo exento de errores, y nuevamente Alexis se asignó la culpa de varias muertes y desgracias. Los recuerdos robados a otras personas, unidos a las pequeñas alteraciones temporales que había empezado a desarrollar y que borraban hechos consumados de todas partes excepto de su memoria, empezaron a pasarle factura, sufriendo en ocasiones alucinaciones visuales con gente que debía estar muerta o con sucesos pasados.
Recientemente, y en un intento de atenuar el estrés emocional que sufre, Alexis procura planear con más detenimiento sus acciones, además de empezar a probar un coctel de medicamentos que estabilice la química de su cerebro y le haga menos vulnerable a tensiones mentales.
Identidad superheroica: Vodou (Vudú)
Tipo: Mutante Genético
Fotografía de archivo:
Historial:
Hijo/a de inmigrantes haitianos en Nueva York (apellido original Boucher), originalmente dos mellizos de distinto sexo en el vientre materno que, debido a la manifestación temprana y fortuita de una mutación genética, pasaron a ocupar un único cuerpo desde antes de nacer.
Durante toda su infancia ambos hermanos habitaron el cuerpo del niño sin dar muestras de ser algo más que un chico normal, a todos los efectos dos consciencias pero una sola personalidad. Al llegar a la pubertad comenzaron a manifestarse sus poderes, pero también empezó a alternar involuntariamente entre los cuerpos masculino y femenino. Eso provocó una gran confusión en Alexis y su entorno, pero pronto aprendió a camuflar esos cambios. A pesar de todo, sus resultados académicos mejoraron cualitativamente y recibió varias becas con las que pudo empezar una carrera universitaria años antes de lo normal.
Por esa época su hermano mayor Henri ingresó en el departamento de policía de Nueva York, y su padre les abandonó. En pocos años Alexis se doctoró en varias carreras universitarias relacionadas con la biología y la medicina, en un intento de aprender más acerca de su condición. Los continuos cambios corporales así como su creciente belleza fueron difíciles de disimular, pero la reclusión debida a sus estudios intensivos facilitó las cosas. En cuanto a sus otras capacidades, se abstuvo de usarlas por precaución y porque, a pesar de todos los conocimientos que había adquirido, seguían siendo inexplicables. Experimentó con su sexualidad lejos de su entorno académico y usó sus estudios de medicina y psicología para analizar su propio comportamiento, llegando a la conclusión de que poseía una única y fusionada personalidad que podía manifestar leves diferencias en sus emociones y respuestas según el cuerpo que habitara.
Aún no había alcanzado la mayoría de edad cuando su hermano mayor falleció en un tiroteo, durante el robo frustrado a un banco por parte de un criminal de poca monta conocido como Semtex Jack. Sin embargo, aunque éste fue capturado y encarcelado por sus numerosos robos, su culpabilidad en el asesinato de Henri no pudo ser suficientemente probada, con lo que fue condenado a una pena muy inferior a la debida. La pena por la pérdida, y el sufrimiento por el fallido proceso judicial hicieron que la madre de Alexis enfermara y acabara falleciendo tras unos meses. Por su parte Alexis, consumido/a por la ira y la frustración, abandonó sus ya demasiado fructíferos estudios y comenzó un largo vagabundeo por el lado más oscuro de la ciudad y de su propia psique.
Alienado/a de su propia vida y deseando ser cualquier otra persona, empezó a poseer a individuos al azar y a vivir a través de ellos sus ajenas vidas. Consciente de la perversión moral de estos actos se hundió aún más en su miseria pero, con el tiempo, y precisamente por el contacto repetido con tantas y tan mundanas existencias, alcanzó un estado de equilibrio hasta llegar a apreciar a alguno de esos individuos e incluso tratar de mejorar sus vidas. Un pequeño y selecto grupo de personas de diferentes estratos sociales y modos de vida se convirtieron para Alexis en las válvulas de escape para experimentar emociones y vivencias que se sentía demasiado dañado/a o vulnerable para resistir por su cuenta. De este modo llegó a considerarles casi su familia y le proporcionaron la catarsis que precisaba.
Pero esta curación no llegó sin mácula. Viviendo las vidas de otras personas cometió errores que las perjudicaron o dañaron, y los recuerdos y remordimientos le asaltarían con frecuencia, en sus sueños o en sus momentos ociosos. Lentamente la resolución de resolver las injusticias que Alexis o sus anfitriones habían sufrido (incluso por su causa) fue invadiéndole/a, y se convirtió en el guardián de su bienestar.
Llegado cierto momento se atrevió a abandonar prolongadamente sus refugios humanos y, recorriendo los peores barrios de la ciudad bajo ropajes informes o saltando de vagabundo en vagabundo, inspeccionó los bajos fondos criminales y con sensación de agravio y aprovechándose de su facultad para actuar a través de otros, sembró la discordia y buscó el castigo para ellos y sus cómplices.
Sin embargo ese contacto íntimo con sus mentes que no podía evitar, le hizo descubrir en varios de esos criminales la misma desesperación e impotencia que Alexis llevaba sintiendo mucho tiempo. Comprobó cómo algunos delinquían movidos por la necesidad o la confusión, y dudó de sus propios métodos. Intentó reformar a los más prometedores y en algunos casos lo consiguió, estableciendo una pequeña red de confidentes e infiltrados en las mafias locales, con un tal Devin Hunter como enlace directo.
Ese periodo tampoco estuvo exento de errores, y nuevamente Alexis se asignó la culpa de varias muertes y desgracias. Los recuerdos robados a otras personas, unidos a las pequeñas alteraciones temporales que había empezado a desarrollar y que borraban hechos consumados de todas partes excepto de su memoria, empezaron a pasarle factura, sufriendo en ocasiones alucinaciones visuales con gente que debía estar muerta o con sucesos pasados.
Recientemente, y en un intento de atenuar el estrés emocional que sufre, Alexis procura planear con más detenimiento sus acciones, además de empezar a probar un coctel de medicamentos que estabilice la química de su cerebro y le haga menos vulnerable a tensiones mentales.
